#10

-Seguramente te das cuenta de que no podemos encontrarnos con él así. De todos modos, ¿qué le digo: "Hola, soy tú, de otro mundo, cómo estás"? Creo que primero preferiría observarme a mí mismo eee quiero decir a él desde lejos.

-Dentro de 15 minutos dará una conferencia en un gran auditorio, nos sentaremos en algún lugar del fondo, no se fijarán en nosotros. Bueno, ven conmigo, después de todo hemos venido aquí por algo.

No me convencía demasiado la idea, pero no tenía nada mejor, así que me dejé arrastrar a esta sala. Fue una sensación terriblemente extraña verme a mí mismo, y que hablaba de algo de lo que normalmente no tengo ninguna idea. Además, disfrutaba mucho, enseñando a otros, teniendo contacto con los jóvenes y tenía algo que yo echaba de menos, sentido del humor. Estaba constantemente bromeando sobre algo, lo que también hacía imposible aburrirse en la sala. Sin embargo, lo que más me llamó la atención fue que noté un anillo en su mano.

- Ya sabes que te queda bien todo el papel del profesor, realmente parece mega profesional- bromeó Emma conmigo, que claramente se lo estaba pasando en grande.

- Ja, ja, ja. . . Podríamos intentar seguirlo discretamente de alguna manera, quiere ver cómo y dónde vive.

Cuando, al salir del campus universitario, no se dirigió al coche, pensé que debía vivir en algún lugar cercano. Y, efectivamente, al cabo de un cuarto de hora giró hacia la entrada de una pequeña pero bonita casa. Cuando vi que al verlo dos niños pequeños y risueños salían corriendo de la casa gritando para saludar a su padre no pude evitarlo e inmediatamente sonreí. Siempre he soñado con tener una familia, preferiblemente grande, porque por desgracia fui hijo único, pero hacen falta dos para bailar el tango, y mi servicio en el ejército lo hace un poco difícil.

-Son bonitos, los niños son bonitos y tienes una bonita casa- dijo Emma con una sonrisa.

Yo, sin embargo, centré mi mirada en la mujer que apareció en el umbral de la puerta y en cuanto vi su rostro mi corazón se aceleró de inmediato, giré nerviosamente sobre mis pies y con paso rápido decidí marcharme. Emma corrió detrás de mí gritando mi nombre, pero la ignoré por completo. Debo haber estado imaginando todo esto.